Solo espuma

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Solo espuma

De Donina Romero
Toda una reivindicación de independencia y positiva autosuficiencia

La protagonista, cuyo marido acaba de abandonarla yéndose con la mejor amiga de ella, en un profundo desasosiego por tal circunstancia, nos va narrando sus vicisitudes matrimoniales, desvelándonos con comicidad los hechos más relevantes del tiempo que duró su matrimonio, describiéndonos sus momentos de felicidad, sus intimidades y todo lo que fue y pudo ser, unas veces con una gran nostalgia y en otros con profunda rabia y rencor, mostrándonos toda una serie de registros desde el decaimiento hasta la exaltación, y desde el orgullo hasta la humildad, aunque siempre en un tono de humor hilarante que hace las delicias del público llevándolo a mantener durante todo el espectáculo una sonrisa constante que conduce en multitud de ocasiones a la carcajada más estruendosa.

Catalina es todo dolor. Se ahoga en llantos y sollozos pues su matrimonio ha concluido en bostezos y cuernos. ¡Con Moluchi, su “amiga”, su “íntima amiga”! ¡Pero si tiene un carácter peor que el vinagre viejo! ¡Con esa cara de banqueta! ¡Qué va, qué va, qué va...! ¡Esa presumida, esa echona...! Partiendo de esta premisa la autora nos describe una mujer arquetípica, hasta ahora conforme con su convencional vida. Esta decepción será el detonante para que Catalina repase su tópica vida, la de su marido y la de sus amistades hasta llegar a la conclusión de que todo en la vida es ciclo, etapas. Que su marido en realidad ya le molestaba más que un divieso y que mejor sola que mal acompañada. ¡Toda una reivindicación de independencia y positiva autosuficiencia!

Un monólogo cómico que busca la inmediata empatía del espectador para hacerles pasar un rato estupendo de buen teatro.